Thursday, March 22, 2007

Actualización 22 de Marzo

Amigos de la Natación y Las Actividades Acuáticas:

Se inicia un nuevo ciclo en la vida institucional de Aipen, hemos formado una nueva comisión directiva días pasados, donde confluyen especialistas de diversas expresiones del mundo acuático. Esta representación no es casual, y ratifica lo que desde Aipen venimos pregonando desde hace muchos años: abrir el espacio a lo nuevo, crear redes de intercambio, compartir las experiencias, derribar los muros que nos aislan, crecer juntos y todo esto con muchísimo respeto y admiración por quienes nos precedieron y enseñaron el camino. Tenemos dos años por delante de mucha tarea y nos alegra compartirla con ustedes, bienvenidos .
Quienes deseen comunicarse para cualquier inquietud no duden en enviarnos un mail a aipen@hotmail.com
Capacitación
Aipen ha formado un plantel de especialistas preparados para dar capacitaciones a colegas y otros interesados en Argentina y el exterior. Se pueden dictar capacitaciones regulares, o concentradas en pocos días a clubes, escuelas, organismos públicos o privados.
La temática se puede combinar o desarrollar en forma separada.
Entre otros contenidos podemos mencionar: enseñanza y entrenamiento de natación, organización de escuelas de natación, organización de la actividad de natación en las colonias de vacaciones, natación escolar, enseñanza por grupos de edades desde bebés a adultos mayores, nado sincronizado, gimnasia acuática, gestión de natatorios, nutrición deportiva, prevención de lesiones y muchos temas más.
Sólo deben enviarnos un mensaje a aipen@hotmail.com para acordar fechas y condiciones. Aipen no dicta capacitaciones "enlatadas", los proyectos se ajustan a las necesidades de quienes la solicitan.
Recomendamos:
  • La página de fen online www.fen.org.ar , en estos momentos cubriendo muy bien los detalles del mundial de natación de Melborurne (Australia).
  • Para instituciones con natatorios, el ing. Juan Ramón Fulugonio (matrícula 2049 C.P.I.Q) ofrece el servicio de confección en planes y planos de evacuación y emergencias y asesoramiento integral en seguridad e higiene del trabajo.Su mail es juanrfulugonio@yahoo.com.ar
Artículo:
En el día de hoy ofrecemos un artículo sobre un tema que parece no ser específico de los deportes acuáticos pero se encuentra vinculado ya que algunos alumnos que tenemos lo padecen y no lo saben. Es sobre fibromialgia y nos lo ha proporcionado nuestra colega Vanina Delfino. Y con esto nos despedimos hasta la próxima publicación, ¡que la pasen bien!
Fibromialgia

¿Qué es la Fibromialgia?

El término se refiere a un conjunto de síntomas con una causa fisiológica no clara, pero los síntomas juntos constituyen una entidad patológica claramente reconocida y distintiva. Fibromialgia es una condición común asociada con el dolor muscular, la fatiga, trastornos en el dormir, irritabilidad, disfunción cognitiva, rigidez y cambios del estado de ánimo; el dolor es irradiado a lugares del cuerpo que son sumamente sensibles y con sólo tocarlos producen dolor. La fibromialgia afecta alrededor del 2 % de la población de Estados Unidos y se presenta más frecuentemente en mujeres que en hombres; la relación de 9 a 1, expresa una prevalencia tres veces más a menudo en mujeres que en hombres. Se manifiesta mayormente de la tercera a la sexta década de vida; predomina en mayores de 50 años pero ha sido descripta tanto en niños como en adultos mayores. No se ha comprobado daño orgánico en las articulaciones ni en el músculo.
Fibromialgia es una forma de Síndrome Crónico del Dolor no inflamatorio o Reumatismo de tejidos blandos, los cuales son términos ampliamente usados para describir un grupo de desórdenes que causan dolor y rigidez alrededor de las articulaciones y en los músculos y huesos.
Dolores músculo-esqueléticos difusos, acompañados de rigidez, parestesias, falta de sueño reparador y cansancio fácil se asocian a la presencia de numerosos puntos dolorosos distribuídos amplia y simétricamente. Sin embargo, la fibromialgia puede ocurrir en gente con varias formas de artritis o enfermedades relacionadas como la artritis reumatoidea y el lupus.
De etiología desconocida, la fibromialgia no puede ser diagnosticada por análisis de laboratorio. Los resultados de las radiografías y los análisis de sangre son normales. Por consiguiente, el diagnóstico está basado en una cuidadosa historia y examen físico.
En 1990, el Colegio Americano de Reumatología (ACR), una organización de 7000 reumatólogos aproximadamente (especialistas en enfermedades músculo-esqueléticas y desórdenes inmunológicos), y otros profesionales dedicados al tratamiento de la artritis, desarrollaron una definición para la fibromialgia. De acuerdo a la clasificación de la ACR, una persona padece de fibromialgia si tiene una historia de dolor generalizado de al menos tres meses de duración y sensibilidad del dolor anormal en al menos 11 de 18 sitios específicos en el cuerpo que son llamados puntos sensibles (ver figura 1). Éstos son áreas del cuerpo dolorosas a la presión.

Síntomas y signos – Manifestaciones clínicas

Los síntomas consisten en dolor sordo generalizado y difuso y rigidez del tronco y de las cinturas escapular y pélvica. Otros pacientes se quejan de dolor y debilidad muscular generalizada. Los dolores musculares aparecen incluso después de un ejercicio poco intenso. Siempre hay cierto grado de dolor, de intensidad variable; de carácter corrosivo, sordo, profundo, de tensión o rigidez. Los pacientes con fibromialgia a veces tienen un umbral del dolor más bajo de lo habitual. La rigidez suele notarse por la mañana al levantarse y a menudo se alivia a lo largo del día. Todos los pacientes se sienten fatigados o agotados y ya están cansados cuando se levantan por la mañana. Es frecuente que se despierten por la noche y les cueste volverse a dormir. Los síntomas empeoran en situaciones de estrés y ansiedad, con el frío, el tiempo húmedo, y tras el ejercicio o esfuerzos excesivos.
Dolor
Dolor músculo-esquelético generalizado es el síntoma más común de la fibromialgia. Generalmente ocurre en múltiples sitios del cuerpo, sin embargo puede comenzar en una región, como el cuello o los hombros, y extenderse a otras áreas después de un período de tiempo. El dolor de la fibromialgia ha sido descripto de múltiples formas: urente, corrosivo, de tensión o rigidez. A menudo varía de acuerdo con la hora del día, el nivel de actividad, el clima, los hábitos de sueño y el nivel de estrés. La mayoría de las personas con fibromialgia manifiesta algún grado de dolor siempre presente; principalmente en sus músculos. Para algunas personas el dolor puede llegar a ser muy severo, incluso incapacitante. Sin embargo el examen físico es usualmente normal, y el individuo puede parecer saludable, un examen específico de sensibilidad revela dolor en determinados puntos sensibles en respuesta a la palpación moderada (menos de 4 kgm). Aún así, muchas personas con esta condición tienen sensibilidad aumentada en todo el cuerpo. Los puntos sensibles asociados a la fibromialgia están ubicados en áreas de sensibilidad comunes con otros trastornos fibromusculares y óseos, por ejemplo el codo de tenista. Un punto doloroso de un lado del cuerpo usualmente tiene su correspondiente contralateral. Muchos de estos puntos pasan desapercibidos para el paciente hasta que son examinados por el especialista.

Fatiga y trastornos del sueño
La mayoría de las personas con esta enfermedad sufre fatiga, disminución de la resistencia física o el tipo de agotamiento sentido con una gripe o la falta de sueño. Muchas veces la fatiga es severa y representa un problema mayor que el dolor. Los síntomas de fatiga son similares a los que padecen los pacientes con Síndrome de Fatiga Crónica (SFC), sin embargo estas dos entidades están diferenciadas. Aún así, gente con fibromialgia puede encuadrar en la definición de SFC y viceversa. Por la similitud de estas dos entidades, algunos expertos creen que son variantes del mismo desorden.
Se han encontrado trastornos en la estructura del sueño, con ausencia de sueño reparador o interrupciones del mismo. Este trastorno en la fase de sueño profundo altera muchos mecanismos fisiológicos como la producción de sustancias químicas que regulan la sensibilidad del dolor. Algunos investigadores creen que éstas son las causas de la fibromialgia; esta teoría necesita más estudio, pero es claro que los trastornos del sueño empeoran los síntomas de fibromialgia. Las personas tienen dificultades para conciliar el sueño, el sueño es liviano y se despiertan frecuentemente durante la noche. A menudo cuando se despiertan se sienten cansados, incluso después de haber dormido toda la noche. El cansancio puede ser indiferente o causar una disminución de la resistencia, hasta el agotamiento extremo de un día al otro.

Alteraciones en la concentración y el estado de ánimo. Alteraciones psicológicas
Muchos pacientes con fibromialgia tienen alteraciones psicológicas, aunque hay desacuerdo sobre si éstas son reacciones al dolor crónico o si los síntomas de fibromialgia son secundarios al trastorno psiquiátrico. Algunos han sido diagnosticados de sufrir depresión, ansiedad, somatizaciones e hipocondría.
Son comunes los cambios en el estado de ánimo, sentimientos de tristeza y de depresión. Estos cambios habitualmente se reflejan en la capacidad de concentración y en el rendimiento intelectual. Los pacientes pueden sufrir ansiedad e incluso algunos investigadores creen que existe una conexión entre la fibromialgia y algunas formas de depresión o ansiedad crónica. Estos sentimientos tienden a parecer y desaparecer y son más emergentes en momentos de extrema fatiga o ansiedad.

Otros problemas
Dolores de cabeza, migrañas, dolores asociados con los músculos del maxilar (desorden temporomandibular), dolor abdominal, hinchazón y alternancia de constipación y diarrea (síndrome del intestino irritable o colon espástico), espasmos urinarios, vértigo, piernas inquietas, endometriosis y entumecimiento y hormigueo de los pies y las manos.
Cómo se diagnostica la fibromialgia?

La fibromialgia se diagnostica por una historia de dolores generalizados y demostrando con la palpación la presencia de al menos 11 puntos dolorosos de los 18 que existen.

Figura 1: puntos sensibles para el diagnóstico de fibromialgia (Todos bilateralmente)
1- inserción del músculo suboccipital en la base del cráneo,
2- cara anterior de los espacios entre las apófisis transversas de C5-C7,
3- punto medio del borde superior del músculo trapecio,
4- por encima de la espina escapular junto al borde interno de la escápula,
5- segunda unión condrocostal,
6- epicóndilo,
7- cuadrante supero-externo de las nalgas,
8- cara posterior de la prominencia trocantérea,
9- almohadilla grasa interna de la rodilla.
El ACR considera para el diagnóstico, además de la existencia de estos puntos, una historia de dolores difusos. El dolor se considera difuso cuando se cumplen todos los requisitos siguientes: dolor del lado izquierdo del cuerpo, dolor del lado derecho del cuerpo, dolor por encima de la cintura, dolor por debajo de la cintura, dolor en el esqueleto axial.
Estos criterios son útiles para normatizar el diagnóstico, pero no todos los pacientes los cumplen.
Los resultados del examen físico son normales y no existen alteraciones de laboratorio en los pacientes con fibromialgia.
A causa de que los síntomas de esta enfermedad son generales y a menudo se relacionan con otras entidades, mucha gente padece complicaciones y repite exámenes antes de ser diagnosticada. Es importante consultar un reumatólogo que diagnostique y trate esta patología.
Qué causa la fibromialgia?
La causa es incierta. Los investigadores sospechan de diferentes factores solos o en combinación. Enfermedades infecciosas, traumas físicos y emocionales, cambios hormonales pueden ser detonantes del dolor generalizado, la fatiga y los trastornos del sueño que caracterizan esta entidad. Algunos estudios sugieren niveles anormales de algunas sustancias químicas en sangre o fluidos cerebroespinales que colaboran en la transmisión y amplificación de las señales de dolor hacia y desde el cerebro. La habilidad del sistema nervioso central de inhibir el dolor está dañada.
Cómo se trata la fibromialgia

A pesar de que la fibromialgia es una condición crónica y no curable, es importante que el paciente sepa que no es trastorno deformante ni degenerativo, que existen recursos para el alivio sintomático y también situaciones que agravan los síntomas que deben evitarse.
El tratamiento debe incluir tanto la educación del paciente como medidas no farmacológicas y farmacológicas. Medicación para disminuir el dolor y mejorar el sueño, programa de ejercicios que elonguen los músculos y mejore el acondicionamiento cardiovascular, técnicas de relajación para disminuir la tensión muscular y la ansiedad y programas de educación para ayudar a entender y manejar de mejor manera los síntomas de la fibromialgia.

Educación del paciente: una vez realizado el diagnóstico, el paciente debe ser explicado de la condición y asegurado de que se han excluido otras condiciones más severas como causantes de los síntomas. La responsabilidad del tratamiento es tanto del profesional como del paciente, teniendo este un rol activo en el mismo. Se le deben proveer fuentes confiables de información y aconsejar acerca de grupos de ayuda.
Terapia no farmacológica: El ejercicio es una parte importante del tratamiento y sus efectos han sido ampliamente estudiados sin obtener resultados absolutamente concluyentes, sin embargo, mejora la sensación de bienestar, mejora la resistencia y disminuye el dolor. Se pueden recomendar ejercicios aeróbicos de bajo impacto, tales como caminatas, ciclismo, natación o la gimnasia acuática. Los ejercicios en aguas templadas son bien tolerados, en especial porque ayudarían a reducir el espasmo y dolor muscular. Es importante comenzar la actividad en un nivel de intensidad tolerable, aunque bajo, y luego ir aumentando la exigencia, nunca llegando al agotamiento o dolor. Se puede comenzar con ejercicios de 5 minutos, 3 veces al día, e ir aumentando la duración hasta lograr una actividad de 30 minutos. Los ejercicios se deben realizar de forma regular, idealmente todos los días, precedidos y sucedidos de movimientos de elongación y calentamiento. Los ejercicios de hiperextensión pueden empeorar los síntomas y dificultar la adherencia del paciente al programa. El ejercicio en el agua desinflama y mejora la circulación, logrando que el paciente recupere su movilidad y no pierda rango del movimiento articular. Ejercicios de bajo impacto como Ai Chi y Tai Chi en el agua, aeróbica en parte profunda o caminatas en el agua, a una intensidad del 40 al 70% de la frecuencia cardiaca máxima por no más de 40 minutos, son los más aconsejados. La biorretroalimentación, la modificación de los comportamientos, la hipnoterapia, la eliminación del estrés y el aprendizaje de respuestas de relajación pueden ser útiles en diversa medida. La terapia cognitiva conductual también ha demostrado ser eficaz en los trastornos del sueño secundarios a la fibromialgia. Se debe tener en cuenta que estos son tratamientos prolongados y económicamente costosos. Modos alternativos de terapia, como magnetoterapia, acupuntura y quiropraxia, carecen de estudios bien diseñados que comprueben su utilidad.
Terapia farmacológica: al no ser un proceso inflamatorio, no sorprende que los AINES alivien sólo temporalmente las molestias, así como los glucocorticoides que no deben usarse en estas situaciones. Es de notar que algunos pacientes pueden tener dolor por otras situaciones relacionadas, como cefaleas o dismenorrea, por lo que un ensayo con AINES puede ser intentado por un período de 6 semanas. Los medicamentos que facilitan el sueño profundo y relajan los músculos ayudan a descansar a muchas personas que sufren de fibromialgia. Los médicos también recetan antidepresivos que funcionan elevando el nivel de serotonina en el cerebro. Los niveles bajos de serotonina no están vinculados únicamente con la depresión clínica, sino también con los trastornos del sueño asociados. En dosis más bajas que las recetadas para tratar la depresión profunda, los antidepresivos parecen aliviar el dolor en las personas con fibromialgia y de esta manera, aumentar las posibilidades de lograr una buena noche de descanso. Hay dos clases principales de antidepresivos: tricíclicos, como la amitriptilina , e inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), fluoxetina, paroxetina y sertralina. Estos medicamentos pueden tener efectos secundarios, tales como somnolencia diurna, estreñimiento, sequedad de la boca, aumento del apetito y arritmias cardíacas. Algunos ISRS pueden dificultar el sueño. Estos efectos secundarios raramente son severos, pero pueden resultar molestos. Otro problema relacionado con el uso se antidepresivos es que no todos los pacientes experimentan mejoría, y algunos lo hacen sólo momentáneamente. Algunos estudios han sugerido que al combinar los antidepresivos tricíclicos con ISRS, pueden aumentar los beneficios de cada fármaco, al tiempo que los efectos secundarios de ambos se anulan mutuamente.
Vitaminas y suplementos herbales han sido sugeridos, pero no hay datos concluyentes sobre su utilidad.
Manejo de la fibromialgia

Frecuentemente, el paciente circula por muchos análisis y varios especialistas en busca de respuestas. A menudo, como sus análisis son normales y lucen en buen estado, los médicos, familiares y amigos dudan de la veracidad de sus molestias aumentando los sentimientos de soledad, culpa y angustia. El paciente y su familia debe entender que esta enfermedad causa fatiga y dolor y deben adoptar un rol activo en el manejo de la fibromialgia, ejercitándose regularmente, educándose en su condición y aprendiendo cómo implementar técnicas de relajación y estrategias de manejo del estrés. Afortunadamente, no amenaza la vida y no provoca lesiones musculares o articulares. Mientras 9 (nueve) de cada 10 (diez) personas con fibromialgia trabaja tiempo completo, el 30 % debe cambiar su trabajo. Algunas personas debido a los síntomas severos no pueden desenvolverse en sus trabajos o socialmente, estos individuos requerirán mayor atención y un enfoque multidisciplinario en un centro de tratamiento del dolor con terapistas físicos y ocupacionales, trabajadores sociales, enfermeras, profesionales de la salud mental, consejeros en rehabilitación y especialistas del sueño.
Procesos asociados

Los procesos que se asocian habitualmente a la fibromialgia son el síndrome de intestino irritable, la vejiga irritable, las cefaleas, la dismenorrea, el síndrome premenstrual, el síndrome de las piernas inquietas, el dolor de la articulación temporomandibular y el síndrome seco.
Los pacientes con artritis reumatoidea y otra enfermedades del tejido conectivo pueden padecer fibromialgia, siendo difícil a veces distinguir entre fibromialgia primaria y secundaria.
La fibromialgia tiene muchas semejanzas con el Síndrome de Fatiga Crónica (SFC)., ambos producen fatiga, trastornos del sueño, dolores músculo-esqueléticos y alteraciones psiquiátricas. Sin embargo, el SFC es un síndrome de comienzo brusco, acompañado de síntomas y signos inmunológicos e inflamatorios, como adenopatías, febrícula, dolor de garganta y aparición de nuevas alergias o exacerbación de preexistentes. Existen también diferencias epidemiológicas, ya que el SFC es más frecuente en individuos jóvenes, y a veces esta precedido de una enfermedad viral.


Bibliografía

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American College of Rheumatology, Practical help from the Arthritis Foundation, Fibromyalgia brochure, Arthritis Foundation, 2003

Links de interés
http://www.arthritis.org
http://www.medicinainformacion.com/fibromialgia_libros.htm
http://www.analesdemedicina.com
http://www.medicinainformacion.com
http://www.claudiah2o.com

Traducido y compaginado por Vanina Mariana Delfino
Aportes médicos por Rosario Ramos Mejía